Hoy ha sido mi ultimo día en Praga. Me levanté con un poco de pena y me despedí de los colegas del hostal. Hay que ver que pronto le coge uno cariño a la gente...
De todas formas hoy tenia una pequeña sorpresa esperándome para comer.
Sobre las 2 fui hacia la plaza principal, de nuevo al reloj astronómico, esta vez para reunirme con unos amigos de la universidad que estaban también de paso por Praga. Fue toda una alegría verlos allí, cuando estas lejos de casa y sobre todo si vas solo estas cosas dan muy buena energía para continuar.
Comimos en un chileno que conocía uno de ellos, nos pusimos hasta las trancas de nachos, fajitas, carne, y como no, unas buenas cervezas. Todo por el módico precio de 180 coronas por barba (unos 7€), un precio de risa para lo bien que comimos.
Despues dimos un paseito juntos y me acompañaron a la estación de tren.
Malditos checos, su idioma inteligible y su puñetera manía de olvidarse de "los pocos" en el mundo que no sabemos su idioma... Solo para encontrar la ventanilla de información dimos 27 vueltas, y para colmo, el señor de información de una de las estaciones de tren con mas turistas del mundo NO SABIA INGLES!!! Enfin que pa que me voy a mosquear mas...
Conseguí enterarme de los datos que necesitaba entre señas y sonidos raros y nos fuimos para el anden. Un cigarrillo de la paz aliñao con los coleguitas para agradecerles la compañía, foto de despedida y al tren!
Mi siguiente destino era Cesky Krumlov, un pueblecito muy cerca de la frontera austriaca y que prometía ser el típico pueblo de cuento. Mis planes iniciales no lo incluían, en vez de eso tenia pensado visitar Brno, la segunda ciudad del pais, pero mi gran amigo Pablo (mi guia del freetour en Praga para los que no se acuerden), me aconsejó cambiar de itinerario. Gracias Pablete!
El tren era bastante antiguo, con compartimentos de cuatro personas y la verdad, muy cómodo. En el compartimento íbamos una pareja de checos, una señora polaca y yo. Con la ventana abierta, la brisa con olor a campo nos alegró el viaje porque hacia bastante calor.
Llegamos a Ceske Budejovice, un pueblo donde tenia que hacer un transbordo. El tren llegó con un poco de retraso y solo faltaban 2 minutos para la salida del siguiente . Salí corriendo de uno y por supuesto, todo en checo, así que al ver solo un tren mas en la estación y al revisor tocando el silbato imagine que era el mío.
Menos mal que una vez dentro y a un segundo de que saliera el tren, una especie de intuición extraña inundó mi cerebro. Sin pensarlo pulsé el botón de abrir la puerta y casi me lancé hacia afuera. Menos mal... Solo señalizaron a donde iba cuando empezó a moverse. Ese tren iba a Linz, Austria!! Otra vez: malditos checos! Me salvé de milagro...
El tren no tenia ni enchufes, ni un sitio donde comprar agua, por no tener no tenia baños, solo uno y para mujeres. En el compartimento de al lado un grupo de rusos con una petaca de vodka cada uno en la mano cantaban canticos muy animados de un lado para otro asi que la verdad es que estuvo hasta entretenido.
Un par de horas despues llegué a Cesky Krumlov. Un poco tarde, ya llegando, me di cuenta de que el hostal en el que me iba a alojar solo tenia la recepción abierta hasta las 9 y adivinad que hora era... Pues justo las 9! La estación estaba en lo alto del valle y el pueblo pillaba a unos 20 minutos andando. Ante el miedo de verme tirado, decidí pillar un taxi. Me pedía 10€ por un trayecto de poco mas de 2 km. Un poco de regateo y un par de bromitas del Real Madrid y el taxista accedió a llevarme por 100 coronas. Unos 3 euros y pico.
Llegué al hostal a y veinte, corrí hacia la puerta y de un bar de al lado salió un chaval con pintillas de Jesucristo con muy buen rollito preguntándome si era Rafael. Era el recepcionista. Le agradecí el haberme esperado y le pedí ademas dinero checo para pagar al taxista (solo llevaba un billete de 50€). Me dio 1000 coronas como quien no quiere la cosa y me dijo que a esa hora no había oficinas de cambio abiertas y que lo necesitaría para cenar.
El hostal se llamaba 99Hostel y era una casita rural muy acogedora. Mi habitación, casualmente llamada "los 3 amigos" en español daba al río y a la montaña, unas vistas preciosas. Dejé las cosas y me fui a dar una vuelta por el pueblo.
Estaban los bares llenos, en algunos ponían el mundial, otros tenia grupos en directo... Decidí entrar en uno de estos últimos. Tocaba un grupo de música típica checa y allí bailaba todo el mundo así que porque no, también me eché un bailecito. Después salí a buscar algo baratillo de comer. Encontré una mini pizzeria con dos chavales de mi edad en la barra, él majísimo, ella pa meterla en la mochila y llevarmela pal moro...
Ya con la barriga llena fui a dar un paseo por el pueblo. Era tal y como lo imaginé, callejuelas empedradas, el río rodeándolo todo, el castillo iluminado en lo alto del valle, casas pintadas de varios colores pero sin ser un pegote a la vez y música en directo por todos sitios.
Cuando todo empezó a cerrar, me fui para el hostal a preparar el siguiente dia.
En principio, el siguiente destino seria Viena, pero en el ultimo momento se me ocurrio cambiar Viena por Salzburgo. No se que pasa este finde alli que el unico hostel libre en Salzburgo costaba 40 euros y estaba a 10 km de la ciudad. Plan al carajo, continuo con la opcion original. Viena.
Ya que es mi ultima noche en este pais me gustaria hacer una pequeña reflexion sobre mis queridisimos checos. En general son un poco frios, aunque cogen confianza muy rapido. La gente joven suele ser muy amable, los mayores un poco menos pero en ambos casos las mujeres son mucho mas agradables que los hombres. Si no se dedican al turismo no entienden ni papa de ingles y muchos piensan que España incluye Portugal.
Las mujeres son extremadamente guapas y tienen unos cuerpos de revista. Los hombres no tanto...
Mañana me despido de la Republica Checa para dar paso a Austria. Come on Viena! Sorprendeme!
GASTOS: 1€=25ks
Hostel. 330ks
Comida en Chileno. 200ks
Taxi. 100ks
Pizza cena. 90ks
TOTAL. 720ks=28€
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